Partes del neumático
Cuidar nuestro vehículo es importante para mantenerlo en buen estado y que funcione de adecuadamente mientras esté con nosotros. Para que esté en condiciones óptimas y sepas evitar circunstancias indeseadas, resulta imprescindible conocer algunos aspectos técnicos relacionados con las partes esenciales del coche, su desempeño general, su funcionamiento específico y para qué han sido concebidos dichos elementos.
Consecuentemente, hoy queremos darte un poco de información que te será valiosa a la hora de tener algún desperfecto o necesites reemplazar un neumático que se haya dañado o que esté desgastado.
Los neumáticos son piezas fundamentales porque no sólo sustentan tu coche, también aportan tracción, agarre y adherencia para que tenga un rendimiento apropiado y cuentes con la debida seguridad.
Estructura del neumático
Para que estés un poco más familiarizado, queremos que sepas cómo funciona un neumático, sus partes más importantes y algunos consejos para que los tengas presentes al momento de darles mantenimiento. Su estructura general está compuesta de la siguiente manera
- Flanco: Es la parte lateral o cara del neumático, por lo general marcada, hecha de una goma flexible que se adapta a las deformaciones cuando conduces.
- Hombro: Representa el borde entre la cara y la banda, por lo que es más grueso dado que está diseñado para los bordillos, golpes y para distribuir con eficiencia el calor que produce el movimiento.
- Banda de rodadura: Es la parte que entra en contacto con el asfalto o cualquier superficie. Está diseñada para dar adherencia, procurar una buena conducción y de ella depende la seguridad al manejar. También permite que el agua se desplace por debajo del neumático para evitar el aquaplaning o hidroplaneo.
- Zona baja: Es la parte inferior de la cara del neumático, justo por encima del talón.
- Talón: Se trata de la zona interior del neumático, entre la zona baja y la abertura del rin, que se ajusta a las llantas. Está compuesta por alambre de acero que tienen una forma trenzada y circular.
- Lonas de cima: Son cables de fibras textiles puestos en arcos que tienen ángulos rectos. Están dentro de las cubiertas y sirven para manejar la presión.
- Lonas de carcasa: Son cables de acero, delgados y resistentes, que están cruzados en forma oblicua y unidos, formando unos triángulos que no se deforman.
- Revestimiento interior: Es la cara interna hecha de goma que sirve para retener el aire y proporcionar la estanqueidad.
Los elementos más relevantes a saber son el flanco, la banda de rodadura y el talón. Éstos son los que te darán la pauta para saber si los neumáticos necesitan mantenimiento.
Recomendaciones Carmona Motor's
Para mantener bien tus neumáticos, queremos darte algunos tips para que su rendimiento sea satisfactorio, te proporcionen seguridad, adherencia y te ahorren combustible. Antes de salir de viaje, si vas a conducir en clima adverso o no los ha revisado recientemente, ten en cuenta lo siguiente:
Desgaste excesivo. El desgaste limita el agarre y resulta peligroso en condiciones como la lluvia. La norma es que la profundidad de la banda no sea inferior a 1,6 mm.
Bultos, cortes, bordillazos o roces. Si observas alguna de estas condiciones, lo aconsejable es ver a un profesional para que diagnostique el daño que podría tener el neumático.
Vida útil. Con el tiempo y el desgaste, los neumáticos pierden cualidades. Aunque no caducan, se recomienda su cambio cada 6 años, siempre y cuando no hayan sufrido desperfectos.
Presión. Una presión inadecuada (muy alta o muy baja) puede reducir la estabilidad, generar mayor consumo de combustible, desgaste prematuro, menor adherencia y mayores vibraciones.
Cristalización. Esto pasa en coches que están mucho tiempo a la intemperie y es un mal síntoma. Siempre es bueno evitar los cambios bruscos de temperatura.
Recuerda revisar tus neumáticos periódicamente para saber cómo están y los tengas en buenas condiciones, puedas conducir de forma segura y ahorres más combustible. Con ello no sólo te ahorrarás molestias o accidentes, sino también futuros reemplazos más costosos.
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Cuidar nuestro vehículo es importante para mantenerlo en buen estado y que funcione de adecuadamente mientras esté con nosotros. Para que esté en condiciones óptimas y sepas evitar circunstancias indeseadas, resulta imprescindible conocer algunos aspectos técnicos relacionados con las partes esenciales del coche, su desempeño general, su funcionamiento específico y para qué han sido concebidos dichos elementos.
Consecuentemente, hoy queremos darte un poco de información que te será valiosa a la hora de tener algún desperfecto o necesites reemplazar un neumático que se haya dañado o que esté desgastado.
Los neumáticos son piezas fundamentales porque no sólo sustentan tu coche, también aportan tracción, agarre y adherencia para que tenga un rendimiento apropiado y cuentes con la debida seguridad.
Estructura del neumático
Para que estés un poco más familiarizado, queremos que sepas cómo funciona un neumático, sus partes más importantes y algunos consejos para que los tengas presentes al momento de darles mantenimiento. Su estructura general está compuesta de la siguiente manera
- Flanco: Es la parte lateral o cara del neumático, por lo general marcada, hecha de una goma flexible que se adapta a las deformaciones cuando conduces.
- Hombro: Representa el borde entre la cara y la banda, por lo que es más grueso dado que está diseñado para los bordillos, golpes y para distribuir con eficiencia el calor que produce el movimiento.
- Banda de rodadura: Es la parte que entra en contacto con el asfalto o cualquier superficie. Está diseñada para dar adherencia, procurar una buena conducción y de ella depende la seguridad al manejar. También permite que el agua se desplace por debajo del neumático para evitar el aquaplaning o hidroplaneo.
- Zona baja: Es la parte inferior de la cara del neumático, justo por encima del talón.
- Talón: Se trata de la zona interior del neumático, entre la zona baja y la abertura del rin, que se ajusta a las llantas. Está compuesta por alambre de acero que tienen una forma trenzada y circular.
- Lonas de cima: Son cables de fibras textiles puestos en arcos que tienen ángulos rectos. Están dentro de las cubiertas y sirven para manejar la presión.
- Lonas de carcasa: Son cables de acero, delgados y resistentes, que están cruzados en forma oblicua y unidos, formando unos triángulos que no se deforman.
- Revestimiento interior: Es la cara interna hecha de goma que sirve para retener el aire y proporcionar la estanqueidad.
Los elementos más relevantes a saber son el flanco, la banda de rodadura y el talón. Éstos son los que te darán la pauta para saber si los neumáticos necesitan mantenimiento.
Recomendaciones Carmona Motor's
Para mantener bien tus neumáticos, queremos darte algunos tips para que su rendimiento sea satisfactorio, te proporcionen seguridad, adherencia y te ahorren combustible. Antes de salir de viaje, si vas a conducir en clima adverso o no los ha revisado recientemente, ten en cuenta lo siguiente:
Desgaste excesivo. El desgaste limita el agarre y resulta peligroso en condiciones como la lluvia. La norma es que la profundidad de la banda no sea inferior a 1,6 mm.
Bultos, cortes, bordillazos o roces. Si observas alguna de estas condiciones, lo aconsejable es ver a un profesional para que diagnostique el daño que podría tener el neumático.
Vida útil. Con el tiempo y el desgaste, los neumáticos pierden cualidades. Aunque no caducan, se recomienda su cambio cada 6 años, siempre y cuando no hayan sufrido desperfectos.
Presión. Una presión inadecuada (muy alta o muy baja) puede reducir la estabilidad, generar mayor consumo de combustible, desgaste prematuro, menor adherencia y mayores vibraciones.
Cristalización. Esto pasa en coches que están mucho tiempo a la intemperie y es un mal síntoma. Siempre es bueno evitar los cambios bruscos de temperatura.
Recuerda revisar tus neumáticos periódicamente para saber cómo están y los tengas en buenas condiciones, puedas conducir de forma segura y ahorres más combustible. Con ello no sólo te ahorrarás molestias o accidentes, sino también futuros reemplazos más costosos.
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